Mercurio Retrógrado
- Gabriela Ciminieri

- 16 jul
- 6 Min. de lectura
Sincronicidad entre los Tiempos Cronológicos y los Tiempos del Alma
El Mercurio retrógrado se extiende desde el 18 de julio de 2025 hasta el 11 de agosto de
2025. Lo acompaña Saturno, Neptuno y Plutón en este proceso de internalización y
descenso. Tiene un sextil con Venus, propiciando un diálogo interior muy sanador respecto
de temas como la rivalidad (que es diferente a la competencia), el orgullo, en fin, los
rasgos narcisistas que todos tenemos; el fino equilibrio entre mostrarnos, brillar y
centralizar para buscar el reconocimiento y el aplauso o para compartirnos generosamente.
Quiero poner énfasis en el enfoque de la sincronicidad y el simbolismo arquetípico, más
que en un determinismo tajante, que pone el énfasis en causa-efecto (donde el planeta
CAUSA un evento). Prefiero verlo como una manifestación de la sincronicidad: un patrón
significativo entre eventos internos (psíquicos) y externos (mundanos) que no tienen una
relación causal, pero sí un sentido compartido del tiempo cronológico con el tiempo del
alma, kairós. Los movimientos planetarios, entonces, serían un ESPEJO o una CUALIDAD DEL MMENTO MUNDIAL que refleja procesos psíquicos colectivos e individuales.
Teniendo esto en cuenta, esta retrogradación del viernes es, como siempre decimos,
1. Una Invitación a la Introspección y la Reflexión (Mercurio como psicopompo):
o Mercurio, en la mitología, es el mensajero de los dioses y el psicopompo, el
guía de las almas al inframundo, o sea al inconsciente. Cuando Mercurio
está retrógrado, es un momento en el que la energía de la comunicación, el
pensamiento y el intelecto se dirige hacia adentro, hacia el inconsciente.
o No es un CASTIGO o una fase de MALA SUERTE, sino una pausa cósmica que
nos invita a revisar, reevaluar y repensar. Es un período para IR DESPACIO, OBSERVAR LAS SEÑALES Y USAR LA INTUICION o Se trata de una oportunidad para que la mente penetre en aquellas cuestiones que necesitan ser iluminadas, comprendidas, mejoradas y sanadas,
abriendo puertas que suelen estar cerradas y mostrando aquello que no
podíamos ver. Por ejemplo, cuánta ansiedad puede estar creándonos nuestro
propio Mercurio, atrayendo otros Mercurios igual o más ansiosos. No
olvidemos que Mercurio es la octava inferior de Urano y la ansiedad es
producida por nuestra preocupación por el futuro.
2. Revisión del Ego y la Autoexpresión (en Leo):
o Dado que Mercurio retrógrada en Leo, un signo asociado con la identidad,
el ego, la autoexpresión, la creatividad, el liderazgo y la necesidad de
reconocimiento.
o Podría ser un momento para reevaluar cómo uno se expresa, si se busca la
atención de manera auténtica o por necesidad del ego. También se prestaría
atención a cómo se recibe la crítica y cómo se maneja el orgullo.
o Proyectos creativos o de liderazgo podrían experimentar retrasos o la
necesidad de ser pulidos y revisados, no para ser abortados, sino para ser
perfeccionados desde una perspectiva más profunda.
3. Confrontación con la Sombra en la Comunicación y la Identidad:
o Desde una perspectiva junguiana, Mercurio retrógrado es un momento
propicio para el trabajo de la sombra. Es decir, confrontar y purgar
pensamientos, sentimientos, necesidades y deseos que la conciencia
principal considera inaceptables o que hemos estado evitando.
o Se trata de una invitación a revisar nuestras motivaciones subyacentes al
comunicarnos: ¿comunicamos para ser admirados o para ser comprendidos?
¿Estamos tomando decisiones apresuradas por miedo a no destacar?
o La ingenuidad y la falta de sofisticación que a veces se asocian con aspectos
del arquetipo de Heidi (mencionado en el análisis anterior) podrían ser vistos
como áreas de sombra donde la autenticidad se ve desafiada por las
expectativas externas. Este Mercurio retrógrado en Leo ofrecería la
oportunidad de integrar una autoexpresión más consciente y menos
vulnerable a la necesidad de aprobación.
4. Desafíos como Oportunidades Sincronísticas:
o Las fallas tecnológicas, discusiones o malentendidos típicos de Mercurio
retrógrado no serían vistos como meros inconvenientes, sino como eventos
sincrónicos que reflejan una desconexión interna o la necesidad de reevaluar
nuestros patrones de pensamiento y comunicación.
o Von Franz diría que estos OBSTACULOS son precisamente las señales del
inconsciente para que nos detengamos, miremos hacia atrás y encontremos
un nuevo equilibrio. Todo lo que se traba es una invitación a revisar. No es
un castigo, es una pausa cósmica.
Las dificultades externas serían un reflejo sincrónico de la necesidad de una transformación
interna, invitándonos a explorar las profundidades del inconsciente para emerger con una
conciencia más clara y auténtica.
Viktor Frankl y el Mercurio Retrógrado en el Campo de Concentración: La
Introspección Forzada y el Descubrimiento del Sentido
Viktor Frankl, neurólogo y psiquiatra, sobrevivió a varios campos de concentración nazis,
incluyendo Auschwitz, y es el fundador de la logoterapia, que postula que la búsqueda de
sentido es la principal fuerza motivacional del ser humano. Su experiencia en los campos
fue la prueba más brutal de su teoría.
Si intentamos COLOCAR un arquetipo de Mercurio retrógrado en algún momento de su
experiencia, no sería como un evento astrológico literal, sino como una cualidad
arquetípica y sincrónica del tiempo que vivió, una fase psíquica colectiva e individual
forzada por las circunstancias más inhumanas.
1. La Humildad Impuesta y la Desnudez del Ser (Mercurio Retrógrado como
DESPOJO): Los campos de concentración despojaron a los prisioneros de todo lo
externo: sus nombres, sus ropas, sus pertenencias, sus roles sociales, su dignidad
física. Esta humildad forzada se alinea con la energía de Mercurio retrógrado, que
a menudo QUITA o REVISA lo superficial. En este contexto extremo, Frankl fue
despojado de todo, obligándolo a mirar hacia adentro de una manera que pocos
experimentan.
o Conexión con Mercurio Retrógrado: En lugar de comunicarse y actuar
hacia afuera, la energía se retrae. No hay espacio para la vanidad o el
RUGIDO de Leo. Todo lo externo, las máscaras sociales y las autoimágenes,
se derrumban. La comunicación se vuelve interna, un diálogo con el propio
ser.
2. La Búsqueda Interna de Sentido y el Diálogo Silencioso (Mercurio Retrógrado
como Introspección Profunda): En medio del horror absoluto, Frankl no buscó la
SALIDA física, sino el PORQUE de la existencia. Su grandeza no residió en un acto
heroico visible, sino en la búsqueda silenciosa y obstinada de significado incluso
en el sufrimiento. Escribía notas clandestinas sobre su teoría, observaba a otros
prisioneros, y mantenía diálogos internos (con su esposa, con Dios, con sus
principios). Esta fue una inmersión profunda en la psique, una re-evaluación
radical de todo lo que creía.
o Conexión con Mercurio Retrógrado: Este es el núcleo de la fase
retrógrada: una invitación a la revisión interna. Frankl no podía
comunicarse con el mundo exterior de forma significativa; su comunicación
más vital se volvió un monólogo y un diálogo interior con sus propios
valores y propósito. Su mente, en lugar de dispersarse en el caos, se
concentró en el descubrimiento de una verdad más profunda.
3. La Redefinición del EGO; y la Verdadera Grandeza (El LEO; Interior): En
un entorno donde la individualidad y el ego eran aniquilados, Frankl encontró una
grandeza que trascendía la persona. Su LEOt; (la identidad, el orgullo, la
autoexpresión) no estaba en su melena o su rugido externo, sino en su libertad
interior para elegir su actitud ante el sufrimiento. Él afirma que, aunque no se
pueda cambiar la situación, siempre se puede elegir la actitud. Este es un acto de
soberanía interna, de un YO; que se niega a ser destruido.
o Conexión con Mercurio Retrógrado en Leo: La revisión que hace Frankl
de su propio ego y de lo que significa ser GRANDE en las circunstancias más
abyectas es el epítome de la energía de Mercurio retrógrado en Leo. No se
trataba de autoafirmación externa, sino de un reajuste radical de la propia
identidad y de cómo el YO puede afirmarse no en el poder o la fama, sino
en la elección de la propia perspectiva y la búsqueda de un propósito
trascendente.
4. La Re-construcción del Discurso y la Narrativa Personal (El Resultado del
Retrógrado): Después de su liberación, Frankl no solo escribió sobre su
experiencia, sino que desarrolló la logoterapia, una nueva forma de comunicar
(Mercurio) sobre el sentido de la vida y el sufrimiento. Su libro El hombre en
busca de sentido; es un testamento de cómo una profunda introspección y re-
evaluación interna (la fase retrógrada) puede dar lugar a una nueva y poderosa
forma de expresión y enseñanza para el mundo.
o Conexión con Mercurio Retrógrado: Lo que se aprende y se procesa
durante el retrógrado no desaparece. Se integra y, al finalizar el ciclo,
emerge como una comprensión más profunda, una comunicación más
auténtica y, en el caso de Frankl, una filosofía que ha ayudado a millones.
En resumen, la experiencia de Viktor Frankl en los campos de concentración puede verse
como una manifestación arquetípica de un MERCURIO RETROGRADO EXTREMO; de su alma. Fue
un período de introspección forzada, de despojo de lo superficial, y de una redefinición
radical de lo que significaba ser un YO; (Leo) con propósito, humildad y una
grandeza inquebrantable que residía no en lo externo, sino en la libertad de su actitud y la
búsqueda incansable de sentido. Su vida es un testimonio de cómo los periodos de
REVISION; más duros pueden conducir a las revelaciones más profundas y a la capacidad de
trascender el sufrimiento a través del espíritu humano.
Gabriela Ciminieri
Astrología Viva - Aurora – Campamentos Astrológicos





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